Retomando la serie fotográfica de los “Mitos de Cthulhu”, y con un para de ideas en la cabeza, aproveché una fotografía que hice en Guebwiller, un pueblecito de la Alsacia, para montar la segunda entrega.
Escogí como protagonista a un retoño oscuro de la cabra negra de los diez mil vástagos, también conocida entre los amigos como Shub-Niggurath. Un poco de plastelina, un poco de hilo de los chinos, un huevo espachurrado y mucho photoshop, y ya tenemos un ser informe realizando un paseo nocturno por las calles de un pueblecito de los años 20. Un lugareño previsor admira el espectáculo desde el tejado del ayuntamiento, donde ha tenido la buena idea de pintar un símbolo arcano.