Poco a poco el Flash va expandiendo sus horizontes, habiéndose convertido actualmente en una herramienta realmente potente para la creación de contenido multimedia, no exclusivamente para la red.
Se trata tan siquiera de una herramienta, eso sí, y el resultado dependerá del buen criterio y técnica de quien la utilice. Es asombroso ver las virguerías que hacían algunos hace unos años con Flash 5, con un poco de imaginación y cuatro leyes de física newtoniana. En definitiva, como dirían los Rolling Stones “It’s the singer not the song”.
Eso no quita que unas buenas escofinas o cinceles faciliten el trabajo a los que nos pasamos el día amartillando código. Últimamente hemos estado testeando el Papervision 3D, unas fantásticas librerías de código abierto para ganar una dimensión en nuestras labores animadas para internet. Es el principio de un sinfín de posibilidades en el diseño y programación encarado a la red. Para los diseñadores que reciclan códigos picoteando por el google quizás parezca algo complicado de entrada, dado que debe utilizarse ActionScript 3, y los sistemas orientados a objetos no son amigos de los sistemas orientados a sensibilidades. Sin embargo, les recomiendo hacer el esfuerzo, es una buena forma de aprender.
El resultado, una web cubicunda, que nos muestra las bondades y defectos del flash, el papervision great white, y un servidor. Ahora me tocará experimentar con modelos sacados del 3DMAX, jugando con partículas e interacciones, a ver si conseguimos resultados tan buenos como los que algunos “pro” van colgando en sus blogs.
A final de cuentas, uno es más el esfuerzo que su capacidad base. Es el único consuelo que nos queda a los que no fuimos nunca buenos en nada de entrada, y no paramos de repetirnos monótonamente, como un salmo religioso :
PERSEVERA, PER SEVERA, PER SE VERA…
(Persevera, en las dificultades, por grandes que sean)